Jaime Echenique, un joven barranquillero, que tras pasar los exámenes médicos con Washington Wizards, se convirtió en ese deportista que consiguió lo que ningún otro pudo logar.
El mismo día que se confirmó la noticia de su vinculación con dicho equipo, sumó sus primeros minutos en la NBA al ingresar faltando 3 minutos con 4 segundos para acabar el juego.
En el arranque, la misión era clara: marcar a Tacko Fall, jugador de Cavaliers, cuando su equipo estaba por encima en el marcador. Lo demás, es historia.
«Ha sido un día increíble. Mi celular está que explota en estos momentos. Esto es para mi gente, mi barrio, mi ciudad, mi país, toda Suramérica», comentó en respuesta al periodista colombiano Sigilfredo Franco.
Echenique agregó a su comentario que «todos los sueños se pueden hacer realidad, sólo hay que ser disciplinados y trabajar duro».
«Desde que me fui de mi casa no he parado y llegar a estos momento es satisfactorio. Muchos me dijeron que no era bueno y le doy gracias a Dios por darme la motivación para seguir adelante», expresó.
El barranquillero estará 10 días con Washington Wizards debido a algunas bajas del equipo por Covid-19. Pero más allá del tiempo que dure, ya hace parte de la historia del deporte colombiano.
«Sí vale la pena soñar, ese es mi mensaje», manifestó en medio de lagrimas.
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